Perteneciente a la familia de las Cucurbitáceas, de porte rastrero o trepador, la sandía es una planta herbácea anual, con un sistema radicular muy ramificado. De hojas pecioladas y flores amarillas, solitarias y pedúnculares que atraen a insectos con su aroma, color y néctar.

El fruto tiene pulpa roja, consistente, dulce y jugosa, lo cual no es de sorprenderse si se considera que aproximadamente el 92% de la sandía es agua.

Para detectar el punto de madurez debe considerarse el color, el cual debe ser un verde profundo, no opaco y la cáscara relativamente lisa, además debe poseer el área distintiva en un tono amarillo-cremoso, donde la sandía reposó sobre el suelo durante su maduración.

La sandía contiene los niveles más elevados de Licopeno, que cualquier otro alimento, a éste compuesto se le atribuye el color rojo de la pulpa. Éste carotenoide es un poderoso antioxidante, que en conjunto con una dieta saludable y balanceada ayuda en la prevención de enfermedades.

INFORMACIÓN NUTRICIONAL

Porción: 2 tazas de sandía (Aprox. 280 g.)

Calorías 80
Calorías de grasa 0

Grasa Total 0g
Grasa Saturada 0g
Colesterol 0mg
Sodio 10mg
Potasio 230mg
Carbohidratos Total 27g
Fibra Dietaria 2g
Azúcares 25g
Proteina 1g
Licopeno 15-20mg

Porcentaje de Valor Diario

Vitamina A 20%
Vitamina C 25%
Calcio 2%
Hierro 4%